Ya es un hecho. El brote del coronavirus COVID-19 no solo mata gente, también se cargó el Mobile World Congress 2020 que se realizaría en la Fira de Barcelona del 24 al 27 de febrero del corriente. O eso parece.
El comité organizador junto con la alcaldesa Ada Colau ofrecieron una rueda de prensa para anunciar la suspensión de la mayor feria tecnológica de Europa, evento estrella que se realiza en la Ciudad Condal cada año con la participación de más de 1.000 CEOS de las empresas más vanguardistas en tecnología de todo el mundo. Lamentablemente no podremos ver los útimos gritos en tecnología, mientras que en Amsterdam si se celebra con total normalidad y sin alarmas el Integrated Systems Europe ISE 2020 con la participación de las empresas que cancelaron el MWC, como la Sony, LG, Cisco, Intel.
El director general de la GSMA, Mats Granryd, (CEO de Tele 2) calificó en rueda de prensa "de imposible para nosotros celebrar el evento en estas circunstancias". Por su parte, Colau se apresuró a decir que "por causas ajenas a nosotros, la GSMA comunicó ayer la decisión de suspender el evento". No cuela, pues para nadie es un secreto que ella es una activista ANTIMobile y hasta se le ha escuchado en el pasado querer cargarse el evento.
La escalada de deserciones de empresas estadounidenses como Intel, Facebook, Cisco, McFee, la surcoreana LG, Sony Ericsson, Nokia y Deuscht del MWC obligó a cancelar el evento. La Colau recalcó que no era día para lamentaciones, que se ponían en sintonía con la Organización Mundial de la Salud para evitar la propagación del nuevo virus, pues muchos de los participantes vienen de China. También se dejó muy claro que no hay alerta sanitaria local del coronavirus.
La primer edil dijo que desde ya va a trabajar en la edición de 2021, que está dispuesta a escuchar a los sectores afectados como los de hostelería, taxista y afines, sobre todo al sector hostelería que está sufriendo de innumerables cancelaciones.
Pérdidas millonarias
El evento siempre inyecta a Barcelona unos 500 millones de euros. En 2019, entraron 473 millones de euros. Se echan números y se calcula que son 170 millones de euros de pérdidas que deja la cancelación del Mobile. El golpe será entero para la patronal de las telecomunicaciones GSMA, que tendrá que asumir un mar de reclamaciones e indemnizaciones. Las aseguradoras se "curan en salud" y no pagarán la cancelación del evento porque antes Sanidad había descartado el riesgo de alerta sanitaria en el país.
Será que la inestabilidad política de Cataluña es la verdadera culpable de la suspesión del MWC 2020. El dinero corre más rápido cuando se hace mala política. Se palpa.
La Colau ha tenido que apechugar, apagar los incendios de la cancelación del evento en la rueda de prensa, Habló en catalán y a la final ha tenido que hablar en castellano por petición de colegas de la prensa nacional que no se enteraban bien de su posición parlando només a català.
En la rueda de prensa participaron Teresa Cunilla, delegada del gobierno español en Cataluña: la alcaldesa de Hospitalet de Llobregat, Núria Marín, Ambas mujeres recalcaron que no hay razones de salud pública en el pais que deban preocupar a la ciudadanía por el coronavirus, que no hay peligro en España, pues.
Por su parte, John Hoffman, en calidad de presidente de la GSMA subrayó "Hay MWC hasta el 2023", el contrato de Barcelona sigue igual. Aquí el comunicado de John Hoffman.
Es la primera en la historia del Mobile que no se celebra desde 2006.