Vivimos tiempos difíciles con un virus altamente contagioso que tiene confinada a media humanidad haciendo un distanciamiento social para lograr contenerlo como lo han hecho China, Japón, Corea del Sur y Taiwán.
A unos los tiene padeciendo un alto grado de terror, a otras pensando en su futuro inmediato, a otras perdiendo su patrimonio, a un grueso número de víctimas en los hospitales debatiéndose entre la vida y la muerte y a otras engrosando la lista de fallecidos en las famosas bio estadísticas. Otros por su parte creen que esto es una alharaca histérica con varios fines.
Para los creyentes de la tradición judeo-cristiana, estudiar las 10 plagas de Egipto tanto en el Antiguo Testamento y la Torá es una asignatura obligatoria porque dejaron una huella indeleble en aquel Reino de Egipto, el cual padecieron en carne propia lo enviado por el Dios que creían los hebreos y anunciados al faraón por Moisés y su hermano Aarón. La cosmovisión de las 10 plagas da para un curso, estudio bíblico, sermón, análisis semiológico o una simple conversación.
Quizá te estés preguntando si el COVID-19 es una plaga como áquellas que aterrorizaron a los egipcios hasta tal punto que se produjo la liberación inmediata de los esclavos hebreos. Causaron terror e incertidumbre como la actual.
Quiero recordar cuáles fueron esas diez plagas. No soy una experta en el tema, solo una alumna más de la historia que cuenta Éxodo del 7 al 12.
Plagas
1. El agua del Nilo convertido en sangre.
El Nilo era todo el sustento de Egipto y era igual de importante como el Sol. Convertir el río Nilo en sangre significaba que Dios tenía su poder sobre el objeto y esta plaga corroboró lo que le dijo Moisés al Faraón de que su Dios existía y era más poderosos que los dioses egipcios. El Nilo nulo los volvió locos.
1. La invasión de las ranas.
Las ranas se multiplicaban en el lodo y esto ponía en peligro las cosechas. Esta plaga demostró que el Dios de Moisés tenía una capacidad de poder sobre el río y capaz de doblegar al dios Nilo.
3. Cuando el polvo se convirtió en piojos.
Este hecho de convertir el polvo en piojos hicieron que los magos del Faraón admitieran que lo hizo el dedo de Dios, descartando que Moisés fuera un mago. Está plaga demostró la Omnipotencia de Dios y que abarca la realidad completa de la existencia. Para los egipcios tener sus cabezas contaminadas con piojos era denigrante y les impedía adorar a sus dioses. La pulcritud era una constante en sus vidas.
4. Ataque a los animales salvajes.
Está plaga hizo que enfermarán los animales de carga de los egipcios, así como el ganado que ellos adoraban como deidades. La muerte del ganado fue un golpe a su economía y a sus rituales. La peste hacia los animales demostró que el Dios del que hablaba Moisés no solo existía, sino que intervenía con fines específicos en los asuntos cotidianos de la región y hacia distinción entre los egipcios y los hebreos.
5. Ataques a los animales domésticos.
Solos los animales domésticos de los egipcios enfermaban y morían, el de los hebreos vivían ilesos de la peste del ganado. Esto enfurecía al Faraón o como lo llaman los hebreos al Paró. Acuérdense que el Faraón era un especie de semi dios con poderes rodeado de magos y que creían en diversos dioses, por lo tanto se creían especiales e intocables.
6. Llagas.
Esta peste reveló que Dios es independiente de las limitaciones de la naturaleza y que con solo decirle a Moisés que cogiera hollín en dos puñados y los esparciera frente al Faraón, haciendo con esto que les salieran erupciones cutáneas a la gente, enfermaran y murieran- inclusos sus magos-, demostraba quién era el Autor de la Estructura de la realidad y de cómo funcionaba el mundo.
7. Granizo.
Esta plaga fue en forma de tormenta de granizo con fuego dañando los huertos de los egipcios, cosechas que eran demasiado importante en sus vidas por ser su sustento y su obra. Los dioses del aire del Faraón no podía detener la lluvia de granizo y estaban desamparados. La lección era que comprendieran que el Dios del que hablaba Moisés o Moshé es incompresible, inabarcable e insondable para la mente humana.
8. Langostas.
Las langostas despojaron a los egipcios de todos los cultivos que sobrevivieron al granizo y de paso la multitud de langostas les quitaron a los egipcios la capacidad de ver su entorno. Estaban aterrorizados ya, porque los dejaron sin visión de su territorio. Las langostas se comieron árboles y frutos y arrasaron con toda la agricultura que aseguraba su pirámide alimenticia.
9. Oscuridad como la del purgatorio.
Está plaga asemejaba a la oscuridad del purgatorio y los egipcios quedaron paralizados porque entendieron que estaban antes la realidad correctiva a la que se enfrentan los seres humanos cuando se van de este mundo (la realidad tal y como es). Los dejaron sin mundo por tres días. La oscuridad era tal que no podían moverse y la diosa de la Luna (Isis) no podía alumbrar aquella penumbra. Solos los hebreos tenía luz en sus casas.
10. Muerte de los primogénitos.
Está plaga fue la detonante para que el Faraón diera su brazo a torcer y liberara a los esclavos hebreos, causó terror y muerte a su paso y en su familia, con la muerte de su heredero. El Dios de Moisés ordenó la muerte de los primogénitos de los egipcios, más no los primogénitos de los israelitas que estuvieron a salvo porque las puertas de sus casas las mandó a marcar con la sangre del cordero que iban a comer esa noche del 14 del Nisán, 1513 antes de la era común. Esa señal los salvó que el ángel de la muerte entrara a sus casas. Ahora ellos celebran que se fueron de Egipto gracias a la sangre del Cordero. Los cristianos celebramos que la sangre de Jesús representada por el pan (cuerpo) y el vino (sangre) nos salva del pecado y de la muerte espiritual. Aquel cordero que mataron era en memoria de Cristo quien ha vencido a la muerte y ha traído el pacto de Dios.
Para la visión judía las plagas muestran que todo lo que existe proviene de Dios y sirve a su intención. Cada detalle de las plagas hace tres importantes revelaciones: su EXISTENCIA; su CONTROL y su UNICIDAD. El mundo es cambiante y hasta desconocido. Todo lo que se daba por sentado no era así. Sin Dios, la imagen del mundo no es más que una nebulosa. Hoy se celebra un Séder (Pascua Hebrea) en cuarentena por COVID-19. incluso bajos las condiciones más difíciles como en el pasado.