Alain Delon optó por la eutanasia y se quiso llevar al perro

El reconocido actor Alain Delois optó por el suicidio asistido en Suiza, una decisión que se llevó a cabo el pasado 18 de este mes. Sin embargo, lo que ha causado mayor controversia no es su elección de cómo enfrentar la muerte, sino su petición de que también se aplicara la eutanasia a su perro. Afortunadamente, la vida del animal fue salvada.

Es su vida, su decisión y sus circunstancias. Pero no es razonable que alguien quiera decidir también sobre la muerte de otro ser vivo, como si se tratara de un faraón que desea ser enterrado con sus posesiones más queridas. La cuestión va más allá de ser “progre” o respetar la autonomía individual; se trata de entender que la eutanasia, aunque legal en algunos países, no debería ser extendida a seres que no pueden decidir por sí mismos.

Si bien cada quien puede tener su postura frente a la eutanasia, hay una realidad que no se puede ignorar: no es natural querer controlar no solo la propia muerte, sino también la de otros, ya sean seres queridos o animales. Intentar justificarlo bajo la premisa de una “muerte digna” solo demuestra cómo la sociedad parece alejarse de lo que realmente significa aceptar la vida y su final.

La sociedad parece cada vez más inclinada a desdramatizar la muerte, pretendiendo que ya no nos sorprende, amparándose en el pretexto de elegir “cómo irse de este mundo” con lo que llaman una “muerte digna”. Desde mi punto de vista, lo único que veo es decadencia, una huida de lo inevitable y de la aceptación de nuestra fragilidad, aunque hay casos excepcionales.

Delon, católico y francés, se identificaba como un gaullista, educado “en el espíritu del general Charles de Gaulle”. A pesar de haber vivido en una época marcada por el machismo, su vida estuvo siempre llena de matices. Fue miembro del partido de Le Pen y su trayectoria cinematográfica fue extensa y notable, con obras destacadas como “El otro señor Klein”, "El Gatopardo", "A pleno sol", etc. 

En julio de 2023, tomó la inesperada decisión de vender todo su patrimonio, valorado en 275 millones de dólares, para evitar que sus cuatro hijos, nacidos de tres relaciones diferentes se pelearan por la herencia. Incluso su colección de cuadros, una de sus pasiones por más de 60 años, fue subastada por 8 millones de euros. A pesar de toda esta planificación, no pudo evitar su deseo de controlar hasta el último detalle, incluyendo la vida de su mascota.

“Vanidad de vanidades, todo es vanidad”, dice el Eclesiastés 1:2-18. Este concepto ha sido utilizado a lo largo de la literatura para recordarnos lo efímero de la vida y los placeres mundanos, y para advertirnos del peligro del ego. La decisión de Delon de querer incluir a su perro en su “muerte digna” parece ser un reflejo de ese egocentrismo.

Otro aspecto curioso ha sido cómo la prensa ha tratado la noticia de su muerte, evitando decir claramente que se trató de una eutanasia, como si fuera un tabú escribir o pronunciar la palabra.

Al final, cada uno toma sus decisiones y debe vivir, o en este caso, morir con ellas. Pero hay límites que, en nombre de la humanidad, no deberíamos cruzar.

Fin.

Hay varios artistas que han solicitado la eutanasia o han hablado abiertamente sobre su deseo de morir de manera asistida debido a enfermedades terminales, condiciones debilitantes o sufrimiento extremo.

A continuación, algunos de ellos son:

1. Hugo Claus (1929-2008) El escritor y poeta belga Hugo Claus, uno de los más importantes de habla neerlandesa del siglo XX, optó por la eutanasia en 2008. Claus padecía la enfermedad de Alzheimer y decidió poner fin a su vida antes de que la enfermedad avanzara demasiado. Su muerte fue legalmente asistida en Bélgica, donde la eutanasia está permitida bajo ciertas condiciones.

2. Marieke Vervoort (1979-2019) La atleta paralímpica belga Marieke Vervoort, conocida por su destacada carrera en el deporte, vivió con una enfermedad degenerativa incurable que le causaba dolor crónico. Marieke había firmado los documentos de la eutanasia en 2008, mucho antes de su fallecimiento en 2019, y era una defensora pública del derecho a elegir morir dignamente. Vervoort falleció por eutanasia en octubre de 2019.

3 Tom Zé (1936-) El músico brasileño Tom Zé ha manifestado en entrevistas su deseo de tener la opción de elegir la eutanasia en caso de sufrir de una enfermedad incurable o de un deterioro extremo de su calidad de vida. Aunque aún vive, ha sido abierto sobre su opinión acerca de la muerte asistida.

4. Lucía Bosé (1931-2020) La actriz italiana Lucía Bosé, en los últimos años de su vida, expresó en entrevistas su apoyo a la eutanasia. Aunque no recurrió a ella antes de su fallecimiento por neumonía en 2020, era una defensora del derecho a decidir el momento y las circunstancias de la propia muerte.