En materia de planificación familiar, las féminas tienen ya la opción de congelar sus óvulos por si quieren retrasar la maternidad hasta los 50 años, fecha limite para someterse a un tratamiento de fertilidad en España.
El método se llama vitrificación y permite que la aspirante congele sus ovocitos con la tranquilidad de que su potencial reproductivo se preservará por años como si los óvulos fueran frescos hasta que decida el momento que quiera fertilizarlos con su pareja o con algún donante anónimo.
La tasa de supervivencia de los óvulos congelados gracias a la vitrificación es superior al 95 %, al igual que la tasa de óvulos frescos, en comparación con la vieja técnica de criopreservación.
Por ejemplo, una chica soltera que entra en la treintena y no tiene pareja estable puede recurrir al fiable método, tomando en cuenta que el reloj reproductor de la mujer empieza a declinar a partir de los 35 años con óvulos de menor calidad. Otras excusas para retrasar la maternidad es la situacion económica-laboral que garanticen cierta estabilidad para que una mujer decida cuando quedarse embarazada o es una gran opción para las enfermas de cáncer, que les da esperanzas de ser madres al congelar sus ovocitos antes de someterse a quimioterapias y radioterapias (que afectan la función ovárica).
Para todas las opciones antes mencionadas, ya se cuentan con especialistas en todo el país que pueden congelador tus óvulos. En España en todas las Clínicas IVI (www.ivi.es) lo tienes al alcance de tu mano. En Barcelona, puedes acudir al Instituto Dexeus (www.dexeus.com) Tel. 932274700 y en Madrid lo tienes disponible en el Hospital Universitario Quirón (www.quiron.es).
Para garantizar el éxito, se recomienda que la mujer sea menor de 30 años, que no tenga ningún problema médico que contraindique el tratamiento y que sepa que el gran paso sólo tiene ventajas para preservar la oportunidad de convertirse en madres en el futuro. Aunque el perfil de las mujeres que lo hacen es de 35 a 40 años.
El costo del tratamiento varía entre los 2000 y 3000 euros y en la primera fase se realiza una estimulación ovárica para conseguir más ovocitos, pues la mujer sólo produce uno cada mes y mientras más se produzcan mejor según los especialistas. Cuando los óvulos estén preparados se hace una pequeña intervención llamada punción ovárica para realizar la extracción a la paciente. Una vez extraídos los ovocitos comienza el proceso de vitrificación en el laboratorio donde se almacenan en nitrógeno líquido por tiempo indefinido. No supone ninguna molestia para la mujer y al cabo de dos horas puede irse a casa y retomar su rutina normal (todo el tratamiento puede durar 15 días).
Y si por cosas del destino la mujer fallece ante de utilizar sus óvulos congelados hay dos opciones: se destruyen o se donan.