Muros de la ciudad de Jerusalem (Foto: X. Lichtveld) Original sin filtros
Los instragramers son los usuarios de Instagram, la famosa aplicación fotográfica que cuenta con 100 millones de usuarios que la utilizan diariamente al subir sus fotografías hechas con el movil y utilizar los 19 filtros que le dan un toque singular, vintage o retro a la imagen, la cual es publicada inmediatamente retocada en Internet con un aspecto Polaroid.
Desde que Facebook la adquirio por 1 billón de dólares en abril de 2012, la fama de esta red social ha crecido como la espuma, así como sus detractores, especialmente fotógrafos puristas que dicen defender la originalidad de la fotografia sin filtros superpuestos.
Pero los Instagramers son seres que se dejaron seducir por esta sencilla aplicación que por ahora es gratis, facilisima de usar, agradable, placentera a la hora de subir fotos de la cotidianidad para compartir con sus seguidores o amigos en cuestiones de segundos retocadas y hasta con marcos.
Es muy fácil de instalar en los móviles. Si eres usuario de Android la puedes buscar en la tienda Google play, si tienes un Iphone, un Ipad o Ipod touch descárgala en iTunes.
Quizá Instagram le hace un poco la competencia a Adobe Photoshop, Dispone de 19 filtros que tienen por nombre: Amaro, Mayfair, Rise, Hudson, Valencia, X-Pro, Sierra, Willow, Lo-Fi, Earlybird, Sutro, Toaster, Brannan, Inkwell, Walden, Hefe, Nashville, 1977, Kelvin. Tambien tiene la opcion de dejar la foto normal tal cual fue tomada para ser publicada en su plataforma pero en forma reducida.
Como dice al abrir la comunidad, Instagram es una manera de compartir tu mundo de una manera rápida, sencilla y divertida. No le hace daño a nadie, porque más bien los fotógrafos profesionales han aprovechado el tirón de su fama para mostrar sus trabajos allí, logrando captar la atención de muchos seguidores. Barack Obama hizo campaña presidencial con fotos de Instragram y hasta la revista Time ha publicado fotos del huracán Sandy usando este recurso creativo instaladísimo en el gusto de los usuarios de la red.
Los instagramers no pretenden convertirse en fotógrafos profesionales, sólo divertirse al subir sus fotos en sepia, en azul, blanco o negro, más claras, más oscuras, como en los inicios de la fotografía en dicha comunidad. Lo más llamativo es la rápidez que en cuestiones de segundos una imagen puede ser modificada con los filtros y ser publicada en varias redes sociales o en la misma plataforma al poseer una cuenta en Instragram abierta o privada con sus respectivos seguidores.
Por ahora está de moda, la gente la usa, comparte sus fotos, comenta las fotos de sus seguidores y es una manera publicar masivamente las millones de fotografías que se comparten diariamente en Internet.
Foto modificada con el filtro Kelvin de Instagram