Celebrando un "rescate" sin cheque en blanco

Pedro Sánchez llegó está mañana al Palacio de la Moncloa donde su "gente" le recibía con aplausos tras lograr conseguir del Fondo de Recuperación Europea 140.000 millones de euros para España, tras la Cumbre Europea celebrada intensamente este fin de semana en Bruselas.

Lo importante ahora es conocer el desglose y la letra pequeña de ese rescate, aunque el presidente de gobierno insista en llamarlo de otra manera. De hecho, los medios nacionales tienen prohibido llamarle "Rescate" o se quedarán sin propaganda institucional, aunque la prensa internacional si lo llama "rescue plan". 

No ha sido fácil para el Ejecutivo Español traerse este dinero salvavidas a la economía española. Sánchez ha tenido que hacer de tripas corazón para estar frente a frente del premier neerlandés Mark Rutte, su oponente más férreo que se moja al decir que desconfía profundamente del gobierno español y exige reformas en el sistema de pensiones asi como flexibilizar el mercado laboral, con una cláusula en este acuerdo que tendrán los nórdicos (Rutte, Kutz, Löfven y Frederiksen) un derecho de veto sobre la política económica española. No será un intervencionismo como el rescate pasado a los bancos cuando gobernaba Rajoy, donde los " hombre de negro" venían a España, esta vez no hará falta de momento. 

La Cumbre del Coronavirus, como es conocida buscaba aprobar un fondo de recuperación a los países más afectados por la pandemia COVID-19, como lo es el caso particular de España e Italia, países a su  vez más endeudados y muy golpeados por el coronavirus. El fondo aprobado de 750.000 millones de euros será una realidad, pero solo 390 de estos será a fondo perdido, el resto créditos baratos a devolver en un período amplio entre 2027 y 2058.

El dinero del rescate a España por parte de la UE llegará por tramos y cuando se pongan en marcha las reformas exigidas, con la condición de que los frugales nórdicos puedan paralizar el envío de dinero si hay incumplimientos. Eso no le gustará e Pedro y Pablo, pues se frenarán todos los planes de contrarreformas de la izquierda radical. 

Sánchez no se vino con las manos vacías, se vino con menos dineros del que tenía en mente, tampoco podrá derogar la reforma laboral. Creo que el Ingreso Mínimo Vital quedó en fase embrionaria y está muertico desde ya. Sánchez e Iglesias tendrán que aceptar quién paga, quién gasta y quién decide y eso pondrá de manifiesto su disgusto de que los van a "controlar". 

Aunque como dice Daniel Lacalle, un gobierno que se dice llamar reformista no debería temer a las reformas, ni temer al escrutinio, ni oponerse a que les monitoreen las ayudas. Simplemente presentarían un plan serio que convenza a sus socios ricos de Europa, pero del dicho al hecho hay mucho trecho. 

4 dias y sus noches

La primera Cumbre Europea post-covid duró cuatro dias y sus noches negociando dicho fondo que va mutualizar la crisis que económica que ha causado la pandemia. No fue fácil. El primer ministro de Países Bajos Mark Rutte y el canciller federal de Austria Sebastian Kutz, fueron los villanos de la jornada al apretar las tuercas de ese rescate en toda regla. De hecho, a Rutte le pusieron el apodo de "Dr. NO" al oponerse a todo lo que pedía Sánchez y por supuesto al no permitir que se le diera el "cheque en blanco" sin discutir al detalle ese paquete de rescate.

Hasta el presidente de Francia, Emmanuel Macron, amenazó repetidamente con retirsarse de la mesa de negociaciones si Rutte no aflojaba su postura antisensible y antieuropeo. Sin embargo, es un poco comprensible la desconfianza que tiene Países Bajos hacia Italia, ya que cabe recordar que hace tan solo un año el viceprimer ministro italiano, Matteo Salvini, pidió al gobierno italiano que incumpliera las normas presupuestarias europeas. 

Rutte solo quería préstamos en el Fondo de Recuperación, es decir, 0 euros de subvenciones, pero ahora acepta 390.000 millones de euros en subvenciones. Merkel y Macron insistieron en 500.000 millones de euros para las subvenciones que inicialmente anunciados antes de comenzar la Cumbre el viernes pasado. 

La semana que viene el Parlamento Europeo examinará el acuerdo. El gran avance de todo esto es que la Comision Europea está prestando los 750.000 millones de euros al Fondo de Recuperación de los mercados finanieros, y a continuación, lo pasa a los Estados Miembros para ayudar a financiar la politica fiscal. Más poder de la CE y un escalón arriba hacia la integración europea. 

Los miles de millones de euros negociados en la cumbre europea más larga y agria debe ser gastados en las necesidades reales de la gente, en los autónomos, en los parados, en sanidad, educación, en las familias, en poner en marcha el sector industrial que crea empleos. Ningún gobierno crea riquezas, las riquezas la crean las empresas y una buena política fiscal. 

Se debe acabar con la picarezca de que Europa es un cajero automático del que el gobierno de España (de turno) puede disponer del dinero para gastarlo como quiera. Es un rescate y hay que rendir cuentas a quienes te prestan y aunque la posición de Rutte sea rígida los del Ejecutivo de este país deberían de una vez por todas escuchar así sea una vez en la vida a estrategas de un país donde saben no tener deuda y quieran ayudar al pueblo español de su sobreendeudamiento.